BAD DAY

Hay días que es mejor no levantarse, nosotros cometimos el error de hacerlo y partir de Taman Negara a Kuala Lumpur para coger nuestro vuelo a Sumatra.

Habiamos ya pasado mala noche y nos levantamos con el estomago fatal, y con fibre, y nos pusimos en camino con un cuerpo peor que regular. A la llegada a la capital malaya Aitzi se encontraba fatal, nos montamos en el metro deseando llegar a Chinatown y encontrar un hostel. A la salida del tren meti la mano en el bolsillo buscando mi cartera pero no estaba. Nos habian pegado el palo aprovechando que era domingo y el metro iba hasta arriba. Los carteristas me habian abierto el belcro del bolsillo y nos habian dejado sin tarjetas. Joder vaya dia!!!!!

Llegamos a un hostel, soltamos las mochilas y yo me marche a la comisaria a poner la denuncia. Tras arreglar los papeles volvi con ganas de descansar en la habitación para coger fuerzas, ya que al día siguiente pensabamos partir a Sumatra, pero no pudo ser.

Lo primero que vi nada mas meterme en internet es que había entrado en erupción el monte Sinabung, a 60 km de Medan, la ciudad a la que volabamos, y a unos 20 km de Bukit Lawang y el Danau Toba, nuestro destino en Sumatra.

Que despues de un dia tan infernal la ira de un volcan despierte despues de 400 años es ya el colmo. Dicen que todas las desgracias vienen juntas, aunque siempre que tengo ganas de decir esa frase recuerdo lo que alguna vez me ha dicho mi madre. "Eso no son desgracias, son contratiempos, y eso se supera, las desgracias son mucho peores".

Llamamos a la embajada al dia siguiente y el consul nos confirmo que había explotado esa misma noche otra vez mas y que nos recomendaba aplicar el sentido común y no viajar, ya no solo por el peligro que supone, si no porque como bien dijo, tampoco es ético ni humano ir de turismo a zonas donde hay mas de 30.000 refugiados que se han tenido que marchar de sus casas y con un estado de emergencia, asi que suspendimos nuestros planes y nos quedamos en Malasia.

Esto supone cambiar nuestro itinerario, que iba a ser recorriendo Indonesia de Oeste a Este y hemos decidido terminar de ver lo que nos quedaba de Malasia y Singapur y esperar la llegada de Roberto el dia 12. Despues haremos lo contrario, marcharemos a Bali y recorreremos Indonesia desde alli hacia Java, e intentaremos dentro de un tiempo prudente, si todo está en calma volver a Sumatra, sin duda uno de los lugares que mas nos apetecen a los dos de todo el viaje.

Asique al mal tiempo buena cara, y en las aventuras pasan cosas buenas y cosas malas. TO PALANTE!!!!!

TAMAN NEGARA, LA JUNGLA MAS ANTIGUA DEL MUNDO

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Situado en el centro de la peninsula malaya, Taman Negara es un inmenso parque nacional que presume de ser el bosque tropical mas antiguo del mundo. El campamento base para explorar esta jungla se situa en Kuala Tahan, lugar donde nos alojamos los cuatro dias que estuvimos alli. Los paisajes son espectaculares, pero para nosotros el gran atractivo del parque reside en la facilidad para ver multitud de animales.

Comenzamos haciendo unos pequeños trekkings de unos 9 km diarios, aunque la mayoria de los visitantes eligen hacer caminatas de varios dias, pasando la noche en la jungla. Nosotros quisimos ir poco a poco y en nuestra primera incursion en la jungla decidimos hacer solo camintas de un dia y volver a dormir al hotel.

   

                                     

                                               

El primer dia también fuimos al famoso canopy (puentes colgantes) que se eleva hasta 45 m del suelo para contemplar las vistas de la jungla desde arriba. Sin embargo nos defraudó un poco ya que el recorrido resulto cortisimo y había multitud de gente esperandopor lo que no podias recrearte todo lo que quisieras para hacer fotografias. Tras el canopy subimos a lo alto de una montaña para tener una perspectiva desde lo alto del parque nacional. El camino muy escarpado resulto bastante duro, pero las vistas merecieron la pena.

                                            

                                  

Al siguiente dia el recorrido que hicimos fue sin duda mucho mas espectacular, internandonos en un sendero por medio de la jungla y pudiendo contemplar un monton de animales, como un ciervo que echó a la carrera a nuestro paso o unos increibles monos negros con la parte superior de la cabeza blanca, que recolgaban entre los arboles agitandolos a su paso. Fuee un paseo increible hasta que llegamos a un refugio para el avistamiento de animales. Estos refugios se situan junto a panes de sal artificiales donde estos animales se acercan a lamer, o cercanos a los rios donde paran a por un poco de agua.

Lo que también hay en Taman Negara son enormes insectos. Una noche nos acercamos a conectarnos a internet a un pequeño locutorio, y un bicho de unos 5 o 6 cm de largo y como dos dedos de ancho (y no exagero) se coló dentro. Cuando el dueño del locutorio intento retirarlo, este se le metió en la nariz. Joder, deberíais haber oido como zumbaba dentro de sus fosas nasales. Los que estabamos alli nos quedamos palidos. ¿como podía entrar ese enorme insecto por alli? Pues el tipo todavía se reía. Nosotros literalmente alucinamos. Al final el hombre se desizo de el como quien se quita un moco despues de 5 años sin sonarse la nariz. Asombroso.

Abandonamos Taman Negara tras una mala cena que nos tuvo bastante jodidos del estomago durante un par de días, camino a Kuala Lumpur para volar a Sumatra. No sabiamos lo que se nos avecinaba despues

EL CAMINO A LA JUNGLA

 
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Partimos de Perhentian Kecil a las doce de la mañana en un barco rápido hacia el puerto de Kuala Besut. Tardamos apenas media hora.

Taxi! Taxi! No sir, we are wating for the bus. Los taxistas están siempre a la caza de turistas para meterles un buen sablazo, y vaya si lo consiguen, ya que prácticamente todos acaban montando con ellos sin ni siquiera regatear. Nosotros decidimos que el taxi sería siempre nuestra última opción, asique nos quedamos esperando al autobús en la estación. Ya de paso conocimos a una extraña pareja de viajeros, un italiano que trabaja en Singapur y su compañero de Sri  Lanka, y casi sin querer habíamos encontrado compañeros de viaje.

Tras un rato de espera  cogimos el autobús hacia Kota Bharu. El trayecto fue de unas dos horas en un bus hasta arriba de estudiantes recién salidos del colegio, todos con sus uniformes. Las chicas con un faldón enorme y el velo islámico, los chicos con camisa blanca, pantalones de pinzas y el birrete. Madre mía que calor estarán pasando. Los occidentales que íbamos en el bus parecíamos pensar todos lo mismo, asfixiados por el calor, nosotros en chanclas y pantalón corto, las chicas en tirantes. Habíamos vuelto a la auténtica Asia tras nuestros días en el paraíso, y las diferencias culturales eran mas que evidentes.

Llegados a Kota Bharu cogimos otro autobús hacia Wahaf Baharu para comprar los billetes del Jungle Railway, un tren de tercera categoría que para en todas las estaciones, y que muchos viajeros nos habían aconsejado. Nos llevamos un pequeño chasco ya que dicho tren solo llegaba a Kuala Lipis y allí deberíamos esperar hasta la noche para llegar a Jerantut, a la que llegaríamos de madrugada. Eran demasiadas horas de espera y legar a un pequeño pueblo de madrugada, no nos apetecía en absoluto, asique decidimos coger el tren exprés de las 7 de la mañana, que con menos paradas, hacía el mismo recorrido, llegando a Jerantut a mediodía. Después nos fuimos a buscar alojamiento a la infumable Kota Bharu.

No entendemos como la Lonely Planet recomienda pasar algún día en esta ciudad, ya que por mas vueltas que dimos no encontramos nada que mereciera la pena, y el mayor entretenimiento era ver a las ratas corretear por la ciudad. Estaba plagado, se veían por todos lados, incluso en el mercado nocturno, donde íbamos a cenar y no llegamos ni a sentarnos. Que asco por Dios!

Por la mañana madrugamos para coger el tren hacia Jerantut y volvimos a coincidir en el tren con el italiano y su compañero. Lo cierto que en algunos tramos el paisaje era precioso, adentrándose el ferrocarril en las montañas, y pasamos bastante entretenidas las 6 horas que duró el viaje. 

Llegados a Jerantut nos trasladamos a Kuala Tembeling, donde tras pagar las tasas pertinentes nos montamos en un long boat para remontar el rio durante tres horas hasta por fin llegar a Kuala Tahan, campamento base para explorar el parque nacional de Taman Negara y lugar donde nos encontramos en este momento. El paseo fue emocionante, viendo a los bueyes salvajes cruzar el rio, como en los documentales de La 2 y adentrándonos en la jungla cada vez mas. Eso sí, la barca no tenía mas que un cojín finísimo en el suelo y llegamos como se suele decir “con el culo cuadrado”.

EL INCREIBLE MUNDO SUBMARINO

Bajo el mar puedes ver más fauna en diez minutos, que en un bosque en diez horas. Era una de las primeras frases del video del curso de submarinismo que realicé en nuestra estancia en perhentians, y que poco después pude comprobar, ya que en las cinco inmersiones de las que constaba el curso, mas mi primera “fun dive” pude ver enormes bancos de peces, corales de los mas diversos colores, caracoles rarísimos, langostas prácticamente transparentes e invisibles, tortugas e incluso una enorme barracuda que casi era tan grande como yo.

Y verdaderamente bucear es mucho mas que ver peces. La sensación de “volar” cada vez que hinchaba los pulmones y me despegaba del suelo para sortear una roca o un coral y la relajación que produce pasar todo el tiempo controlando tu respiración es casi una técnica de meditación, respirando largo y despacito para que el aire de la botella dure unos minutitos mas. Ha sido una experiencia que me ha encantado y que sin duda seguiré practicando, tanto a lo largo del viaje como cuando regresemos a España.

Aquí os dejo unas fotos espectaculares que se marcó mi instructor Rubi, durante nuestras inmersiones. Es un placer además aprender con gente tan agradable como él, un saludo desde aquí para ti y para el resto de gente de la escuela!

PERHENTIAN KECIL, UN PARAISO QUE SE RECORRE ANDANDO

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Sacaba la cabeza del agua buscando a Aitzi, pero no quería perderlo de vista. Estabamos haciendo snorkel entre los corales de Romatic Beach cuando vi mi primer tiburón, y necesitaba compartirlo con ella, pero para cuando fui capaz de que me oyera ya lo había perdido. Poco después veíamos dos camaleones saltando entre las palmeras, uno de ellos se lanzo al suelo desde varios metros de altura, aunque lo mas emocionante fue bucear junto a enormes tortugas de mas de metro y medio. Estabamos rodeados de animales y plantas exoticas. 

Perhentian Kecil no es un lugar donde uno pueda ir a empaparse de cultura asiática, ya que en la isla mas frecuentada por mochileros de este lugar del mundo, excepto los dueños de los pocos establecimientos de la isla, todos los demás éramos jóvenes occidentales, unos con ganas de descansar en medio del viaje, y otros, con el deseo de explorar los corales que existen alrededor de la isla. Sin embargo es un lugar que tiene cierta magia. La electricidad proviene de generadores, no existe tráfico, bucear o hacer snorkel es una pasada y el sitio es realmente paradisiaco, con arena blanca y aguas mas transparentes que el mismísimo cristal.

 

Los animales parecen haberla tomado con nosotros, ya que mientras una tarde yo veía mi primer video del curso PADI sentado en el porche de la escuela, apareció Aitzi con algunas pequeñas marcas en la pierna con la forma de la boca de un pez. Joder tio, me han atacado los peces, ¡me picotean!. Al parecer algunos turistas echan pan a los peces y estos ya no se cortan en picotear todo lo que encuentran.

Los pocos senderos para caminar de una playa a otra están llenos de enormes lagartos, y a alguno también parece haberle gustado la sombra del porche de nuestro bungalow.

Nos encontramos muy agusto en estos primeros compases de nuestra aventura. Además aquí hemos hecho nuestras primeras amistades, como Pedro y Beatriz, dos profes de Bilbao que venían a descansar unos días tras su paso por Myanmar y Borneo, y de camino hacia Bali, o de Rubi, mi instructor de buceo, un catalán que anda haciendo la temporada en la isla.

Nos hemos establecido en Koral Bay, en un bungalow con baño bastante básico por 60 RM la noche, y hemos decidido quedarnos durante siete u ocho días. La comida es muy buena, sobre todo el pescado a la brasa que puedes degustar en las barbacoas nocturnas que se montan en la playa. Un pescado, langosta o cangrejo a elegir, acompañado de arroz, patata asada, ensalada, brocheta de salchicha y frutas tropicales viene a salirnos entre 15 y 18 RM por persona (alrededor de cuatro euros), un chollo para nuestros bolsillos.

KUALA LUMPUR, LA CIUDAD DE LOS CONTRASTES

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Aterrizar en Asia es como hacerlo en Marte. Con un calor y una humedad infernales nos dispusimos a buscar el hostel que habiamos decidido reservar para no complicarnos la vida el primer dia. Craso error, ya que dimos al menos tres vueltas a Chinatown hasta que encontramos una puertecita con un cartel de madera que resultaba ser Le Village Guesthouse. Con cientos de establecimientos a los que podiamos haber ido a dormir teniamos que buscar uno en concreto, no volveremos a hacerlo.

  

Kuala Lumpur, la capital de Malasia es mayoritariamente musulmana, pero sin embargo es la parte que menos llama la atención de la ciudad ya que los puntos mas intereseantes se encuentran en los barrios de Chinatown y Little India, donde se respira ese aire asiático cargado de humedad y de olor a comida tan fuerte que se te mete en la nariz y no puedes quitarte en todo el dia.

 

Comimos arroz con carne de cerdo agridulce por 8 myr, que vienen a ser unos 2 euros al cambio los dos, y una bolsa de mangos y sandia por unos 50 centimos (los mangos deliciosos por cierto) y fuimos un rato a descansar ya que 13 horas de vuelo aogtan al mas pintado.

Ya de noche y despues de haber dormido unas horas cogimos un taxi a las torres Petronas. El contraste entre esta parte de la ciudad con la qu habiamos conocido durante la mañana es tremendo, cruzando distritos llenos de rascacielos que rayaban lo futurista.

El simbolo de la nueva Malasia, donde se úbican las oficinas de la primera petrolera del pais y un centro comercial enorme, con un acuario precioso es espectacular, y de noche mas todavia. No sentimos los protagonistas de Blade Runner.

Otro lugar de interes, para conocer el pasado (y todavia muy presente) hinduista del pais son las Cuevas de Batu, situadas a unos 13 km al norte de la capital. El lugar es precioso, con un sistema de cavernas conectadas entre si repletas de monos y pajaros. Por cierto que sufrimos el ataque de uno de estos monos, que no se cortó un pelo en subirse a mis espaldas a intentar abrirme la mochila y al cual tuve que lanzar al suelo de una sacudida, tras la que me enseñó unos dientes que me pusieron los pelos de punta. Subimos los 240 escalones hasta la cueva casi de una carrera. Al final todo quedó en una anecdota pero teniais que habernos visto subir corriendo.

Tras dos dias en la capital malaya mañana partimos rumbo a la costa este del pais, hacia Kota Bharu, desde donde esperamos coger un ferry que nos lleve a las islas Perhentians.

PARADA EN LONDRES

Perdone señor, ¿sabría decirme si aqui puedo coger el bus 123 en dirección Bruce Grove? El conductor del autobus se encontraba parado leyendo una revista y me respondió: ¿a ti te gusta que te molesten cuando es tu hora del descanso? pues es mi hora del descanso y me estás molestando, y cerró la ventanilla. Con estas amables palabras nos recibian en la estación de Totenham hale recien llegados a Londres. Es la famosa cortesía inglesa de quienes curiosamente hace unos dias vi en televisión que tachaban a los españoles de ser unos mal educados.

Lo cierto es que el dia en Londres transcurrió sin mas, hacía mal tiempo, lluvioso y nos limitamos a dar una vuelta por el centro y pasar la tarde en Camdem curioseando. Por cierto que cada vez este mercado es mas asiatico. Comida tailandesa, decoración india y articulos que claramente los tenderos van a comprar a Asia. Me recordó a Chatuchak, en Bangkok, incluso tenian varias camisetas de las que compramos en Tailandia el año pasado. Aún asi sigo pasmandome ante las enormes crestas de los punkis que pululaban por alli y de los personajes que entran y salen del Cyberdog, que por cierto fueron tan amables con nosotros como los conductores del autobus.

Pasamos la noche en la casa okupa de Bruce Grove donde andan viviendo Rosita, Yayo y unos cuantos mas.  Nos acostamos pronto, ya que nos habiamos levantado a las 4 de la mañana para coger el avión y al dia siguiente nos esperaba un nuevo madrugón y 13 horas mas de avión. Nos acercabamos a Asia.

...Y LLEGÓ EL GRAN DIA

Por fín, despues de un par de meses de espera, nos encontramos en Madrid, desde donde esta madrugada pondremos rumbo a Indochina. Con la maleta cargada de ilusión y la sangre hasta arriba de anticuerpos comenzamos nuestra aventura, sabiendo ademas que ya es seguro que recibiremos la visita de algún amigo durante el viaje.

La primera parada será mañana en Londres, donde aprovecharemos para visitar a los colegas y pasar el dia por una de mis ciudades favoritas y que Aitzi ademas todavia no conoce.


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Queremos solamente con esta entrada despedirnos de todos, amigos y familiares, por una temporada y deciros que seguro nos acordaremos de vosotros, y esperamos que nos sigais y contaros lo mejor que sepamos esta sueño que está a punto de comenzar.

Adios peña, nos vemos por aquí siempre que podamos. Un abrazo enorme.